Solomillo ibérico carrasco
Solomillo ibérico carrasco
Descripción
Solomillo de cerdo ibérico de bellota, procedente de cerdos criados en la Dehesa de los Bolsiquillos, Badajoz, y alimentados en régimen de montanera.
Durante esta época, los cerdos ibéricos se alimentan con más de 10 kg diarios de bellotas, las cuales proporcionan mayor cantidad y calidad de grasa infiltrada. Así, se obtiene una carne fresca especialmente untuosa, que presenta un sabor, terneza y jugosidad superiores a las que encontramos en otras carnes ibéricas.
De estos mismos cerdos se elaboran los embutidos y jamones ibéricos de nuestro productor Carrasco Ibéricos en Guijuelo (Salamanca).
El solomillo es una pieza sumamente jugosa y tierna, pero con menor proporción de grasa.
Producto disponible desde finales de enero (cuando termina la montanera). En este momento, las piezas se venden frescas o se congelan para garantizar y mantener todas sus características en su punto óptimo.
Producto descongelado. No admite congelación. Consumir en un plazo de 2 días tras su recepción.
Envasado: pieza al vacío.
Conservación: en refrigeración 4-6ºC.
Recomendación de consumo: Saca la pieza 2 horas antes de ser cocinada rompiendo el vacío para que alcance la temperatura ambiente.
Producto certificado por Calicer PI 0189/05
No contiene alérgenos.
Productor
Carrasco Ibéricos. Así es como se conoce a esta empresa familiar asentada en el pueblo de Guijuelo (Salamanca).
Con más de 125 años de historia en la elaboración de sus productos cárnicos 100% naturales, debe parte de su éxito a las extensas dehesas propias donde sus cerdos crecen en total libertad alimentándose con bellotas y hierbas, consiguiendo así la consistencia carnosa característica de sus piezas. Pese a su tradición artesanal, Carrasco Ibéricos, ha hecho una fuerte apuesta con un amplio compromiso medioambiental.
La magia de la naturaleza, la sabiduría del tiempo, la paciencia del experto. Tierra, arte y calma. Más de 125 años dedicados a la alta gastronomía de productos ibéricos. Aroma, textura, esencia, sabor y cuerpo.
Solomillo de cerdo ibérico de bellota, procedente de cerdos criados en la Dehesa de los Bolsiquillos, Badajoz, y alimentados en régimen de montanera.
Durante esta época, los cerdos ibéricos se alimentan con más de 10 kg diarios de bellotas, las cuales proporcionan mayor cantidad y calidad de grasa infiltrada. Así, se obtiene una carne fresca especialmente untuosa, que presenta un sabor, terneza y jugosidad superiores a las que encontramos en otras carnes ibéricas.
De estos mismos cerdos se elaboran los embutidos y jamones ibéricos de nuestro productor Carrasco Ibéricos en Guijuelo (Salamanca).
El solomillo es una pieza sumamente jugosa y tierna, pero con menor proporción de grasa.
Producto disponible desde finales de enero (cuando termina la montanera). En este momento, las piezas se venden frescas o se congelan para garantizar y mantener todas sus características en su punto óptimo.
Producto descongelado. No admite congelación. Consumir en un plazo de 2 días tras su recepción.
Envasado: pieza al vacío.
Conservación: en refrigeración 4-6ºC.
Recomendación de consumo: Saca la pieza 2 horas antes de ser cocinada rompiendo el vacío para que alcance la temperatura ambiente.
Producto certificado por Calicer PI 0189/05
No contiene alérgenos.
Carrasco Ibéricos. Así es como se conoce a esta empresa familiar asentada en el pueblo de Guijuelo (Salamanca).
Con más de 125 años de historia en la elaboración de sus productos cárnicos 100% naturales, debe parte de su éxito a las extensas dehesas propias donde sus cerdos crecen en total libertad alimentándose con bellotas y hierbas, consiguiendo así la consistencia carnosa característica de sus piezas. Pese a su tradición artesanal, Carrasco Ibéricos, ha hecho una fuerte apuesta con un amplio compromiso medioambiental.
La magia de la naturaleza, la sabiduría del tiempo, la paciencia del experto. Tierra, arte y calma. Más de 125 años dedicados a la alta gastronomía de productos ibéricos. Aroma, textura, esencia, sabor y cuerpo.
Carrasco Ibéricos
Carrasco Ibéricos elabora desde hace más de 120 años sus jamones y embutidos, reconocidos por su máxima calidad. Sus cerdos ibéricos de raza propia, mejorada gracias a la selección de las mejores estirpes, se crían en libertad en la Dehesa Bolsiquillos, Badajoz, un entorno de encinas y alcornoques junto a las aguas del río Ardilla. Después, los jamones y embutidos se elaboran y curan en Guijuelo, Salamanca, uno de los secaderos naturales más importantes de nuestro país.