Morcón ibérico (1)

El morcón ibérico es un embutido selecto, en algunos aspectos similar al chorizo, elaborado con carnes de cerdo de raza ibérica. La mayor parte de esta carne de cerdo ibérico procede de la zona de la paletilla y es carne picada en porciones grandes que se mezcla con pimentón dulce, ajo y sal para que se adobe. La mezcla para morcón luego se embute en tripa natural del intestino grueso, por eso la pieza es ancha. Seguidamente se cura durante varios meses. Puedes comprar morcón ibérico online en nuestra tienda Petramora.

Como en los jamones ibéricos, es el morcón elaborado con carne de cerdo ibérico de bellota. Es un alimento selecto de la mejor calidad. Puedes comprar morcón ibérico online de bellota envasado al vacío que mantiene intactas sus cualidades organolépticas más tiempo en nuestra tienda online Petramora.

• Selección de la carne. En el morcón procede en un elevado porcentaje de la zona de la paletilla.
• Tripa en la que se embute. En el morcón ibérico es del intestino grueso, en el chorizo es del intestino delgado salvo si es chorizo cular.
• Tipo de picado de la carne, tamaño y aspecto. Al comprar morcón ibérico ves que es una pieza más gruesa y su corte muestran claramente el picado en trozos grandes de la carne, por lo que su textura en boca es muy diferente.
• Tiempo de curado. Es mayor al ser una pieza de más grosor y eso se nota en un sabor y aroma diferentes.

Si lo tuyo es lo tradicional, si lo que te gusta de verdad es prepararte unos huevos con patatas y chorizo, prueba con el morcón. O se nos ocurre también la tan socorrida tosta (o bocadillo, claro que si) con un buen pan de horno de leña, un chorro de aceite de oliva virgen extra y “coronando” todo, unas rodajas de morcón y un poquito de queso de oveja, por ejemplo, que brutalidad. No sabemos si contarte que cortarlo en tacos y que aparezcan de repente al morder un pincho de tortilla es otra historia…¿quieres más?

Pues aquí tienes más: completa tu pizza con unos trocitos de morcón y que el queso se funda a su alrededor; dale un toque picante a un plato de pasta o cuando estés preparando un sofrito añádele un poquito de morcón... Vamos, que tiene sitio donde se te ocurra.