Ventresca de bonito 220 g

Conservas Eutimio
Ventresca de bonito del Cantábrico, adquirido directamente en la lonja en campaña. De sabor y textura suave. Conservas Eutimio elabora esta ventresca de manera totalmente artesanal. En primer lugar, tras... Ver más detalles

Ventresca de bonito 220 g

Precio habitual 16,90 €
Precio habitual 16,90 € Precio de oferta 16,90 €

Descripción

Ventresca de bonito del Cantábrico, adquirido directamente en la lonja en campaña. De sabor y textura suave.

Conservas Eutimio elabora esta ventresca de manera totalmente artesanal. En primer lugar, tras seleccionar los mejores ejemplares de bonito, estos se cocinan en salmuera y se dejan reposar toda la noche. A la mañana siguiente, limpian uno a uno manualmente, seleccionando los mejores trozos. Finalmente, se envasan con un aceite de oliva virgen extra de excelente calidad.

Cada conserva elaborada por la familia Eutimio es una obra de artesanía: todo está hecho a mano, con el mimo y maestría de quien conoce a la perfección el producto que trabaja,

Peso neto: 235 g.
Peso escurrido: 190 g.
Sugerencias de degustación: Se puede consumir sola o con guarniciones, o elaborar salsas y rellenos. Ideal como centro de plato, guarnecida con pimientos asados.

Ref:25000159

Productor

Conservas Eutimio

Casa Eutimio se encuentra en Colunga (Asturias), una zona de gran belleza natural y con una tradición gastronómica enorme. Colunga armoniza lo mejor del mar Cantábrico, los valles asturianos y sus montañas. Tal riqueza natural, convierte a esta tierra en un lugar gastronómico de primer orden. Y en ella, el restaurante Casa Eutimio es parada obligatoria.

A tiro de piedra del prestigioso restaurante, se sitúa la pequeña conservera de la familia Eutimio.

Tradición, trabajo, honradez y calidad. Si esos son los valores que, desde 1976, defiende el restaurante, exactamente los mismos son los que encontramos en su conserva.

Todo empieza en la lonja, con materias primas que se seleccionan cuidadosamente, buscando la máxima calidad de la mano de los sellos de calidad asturianos. Después, el producto se trata con absoluto mimo, acompañando con los mejores aceites y haciendo cada lata a mano.

Antes de que una conserva vea la luz, son necesarias muchas pruebas. Esa búsqueda, esa perseverancia y ese saber hacer, son clave en el resultado final: una conserva que consigue sorprender y sobresalir en el panorama conservero actual.

Ingredientes

Ventresca de bonito del nortme 80%, aceite de oliva y sal.

Alérgenos: pescado.

Información nutricional por cada 100 g:

Valor energético 1084 kJ / 260 kcal 
Grasas 18,0 g
de las cuales saturadas 4,5 g
Hidratos de carbono 0 g
de los cuales azúcares
0 g 
Proteínas
24 g
Sal 1 g

Ventresca de bonito del Cantábrico, adquirido directamente en la lonja en campaña. De sabor y textura suave.

Conservas Eutimio elabora esta ventresca de manera totalmente artesanal. En primer lugar, tras seleccionar los mejores ejemplares de bonito, estos se cocinan en salmuera y se dejan reposar toda la noche. A la mañana siguiente, limpian uno a uno manualmente, seleccionando los mejores trozos. Finalmente, se envasan con un aceite de oliva virgen extra de excelente calidad.

Cada conserva elaborada por la familia Eutimio es una obra de artesanía: todo está hecho a mano, con el mimo y maestría de quien conoce a la perfección el producto que trabaja,

Peso neto: 235 g.
Peso escurrido: 190 g.
Sugerencias de degustación: Se puede consumir sola o con guarniciones, o elaborar salsas y rellenos. Ideal como centro de plato, guarnecida con pimientos asados.

Ref:25000159

Conservas Eutimio

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Tradición, trabajo, honradez y calidad. Si esos son los valores que, desde 1976, defiende el restaurante Casa Eutimio, en Lastres (Asturias), exactamente los mismos son los que encontramos en la conservera familiar.

Todo empieza en la lonja, con materias primas que se seleccionan cuidadosamente. Después, el producto se trata con absoluto mimo, acompañando coon los mejores aceites y haciendo cada lata a mano. Antes de que una conserva vea la luz, son necesarias muchas pruebas. Esa búsqueda, esa perseverancia y ese saber hacer, son clave en el resultado final: una conserva que consigue sorprender y sobresalir.

“Decir Lastres es decir Eutimio y viceversa. Calidad, buen hacer y amor por la cocina”.